Raza de perro LABRADOR RETRIEVER


LABRADOR RETRIEVER

Labrador Retriever

Descripción

El Labrador Retriever es un perro cobrador de talla grande, activo, robusto, de constitución fuerte, de cuerpo algo alargado, pecho y costillas amplias y profundas y miembros posteriores anchos y fuertes. Su cabeza es ancha, con un cráneo amplio, ojos color miel y de tamaño medio que le dan una expresión de perro dócil. Sus orejas son medianas y caídas, mientras que la cola es ahusada, similar a la de la nutria. Su pelaje es muy característico de la raza, siendo corto, denso, duro al tacto, liso y con una capa interna de pelo resistente al agua. El color del manto del Labrador Retriever es o negro, amarillo de distintos tonos o hígado/chocolate. Pueden darse ejemplares con una pequeña mancha blanca en el pecho.

  Origen e historia del LABRADOR RETRIEVER

El Labrador Retriever tienen un origen incierto. Al parecer estaban presentes en Terranova antes de la llegada de los barcos pesqueros británicos quizá traídos por portugueses, vascos o incluso antes por los vikingos. A finales de Siglo XVIII había dos tipos de perros labradores (llamados entonces perros de San Juan) en la isla: uno de tiro que derivó en el Terranova; y otro más pequeño de pelo suave y negro experto cobrador que fue exportado a Inglaterra donde los aristócratas lo usaron principalmente como perro cobrador en la caza de faisanes, patos y otras aves salvajes.

En 1950 el Labrador Retriever aún era un perro rural pero saltó a la fama mundial por su excepcional temperamento.

Hoy en día el Labrador Retriever es una mascota muy popular con amplia demanda en muchos países del planeta, especialmente en EEUU y Reino Unido, y es usado además como perro de trabajo y de caza siendo la segunda raza más abundante tras el Pastor alemán.

  Temperamento y comportamiento del LABRADOR RETRIEVER

El Labrador Retriever es un perro usado tradicionalmente en actividades cinegéticas especializado en la recuperación de aves acuáticas cazadas con fusil, siendo muy eficaz en tierra y agua. Hoy en día es la mascota familiar más popular en muchos países del planeta, situándose como una de las 10 razas de perros más populares del mundo.

Los labradores adoran el mundo y todo lo que hay en él, sobre todo la comida y bañarse. El pelaje impermeable del Labrador Retriever está diseñado para “vivir” en el agua.

Hasta 1950 el Labrador Retriever era un perro rural y su popularidad despegó por una sencilla razón: su temperamento entrañable. Siente la imperiosa necesidad de llevarnos cosas (dado su carácter de cobrador de caza), es generoso, sensible y de fácil socialización. Es además un perro apto para convivir con niños, muy leal y protector hacia la familia.

De igual modo que el golden retriever, el Labrador Retriever es también apreciado como perro de trabajo en tareas tales como guía para ciegos, perro de escucha para personas sordas, perro de caza, detector de drogas ilegales, búsqueda y rescate, para terapia en hospitales. Por sus características de perro cazador el Labrador Retrieverrequiere actividad intensa y necesita mucho ejercicio, paseos, correr y jugar.

Por último, entre los problemas del Labrador Retriever destaca su predisposición al caos y el hecho que sean perros muy ruidosos, sobre todo si se aburren, se sienten solos o permanecen tiempo inactivos.

  Salud y cuidados del LABRADOR RETRIEVER

El Labrador Retriever es una raza criada masivamente. Esto ha provocado que presente algunos problemas de salud como en las articulaciones (luxación de rótula, displasia de cadera) alergias cutáneas y el ectropión. Cuenta además con algunas enfermedades congénitas características del Labrador Retriever como problemas oculares, hipotiroidismo, diabetes mellitus, estenosis subaórtica y epilepsia. Asimismo conviene revisarle sus ojos y orejas caídas para prevenir infecciones y hongos.

Respecto a su cuidado, el Labrador Retriever no precisa muchas atenciones salvo aquellas veterinarias comunes a todos los perros. Para su equilibrio físico y emocional el Labrador Retriever necesita salidas diarias y actividad constante. Además convine controlarle su dieta ya que tiende al sobrepeso.

Por último, para el mantenimiento de su pelaje es necesario dar al Labrador Retriever un cepillado regular cada dos días tanto para retirar los pelos muertos, como para prevenir problemas en la piel. Igualmente el Labrador Retriever necesita ser bañado cada cierto tiempo.