RATÓN DE PRAGA
Pražský krysařík
Descripción
El Ratón de Praga o Prazsky Krysarik es una raza muy pequeña de las dimensiones de un Chihuahua. Se trata de un perro muy activo, vivaz, resistente, de cuerpo flaco y delicado con extremidades de huesos finos. Su cabeza tiene forma de pera, con las mandíbulas sólidas y las orejas triangulares, erectas, de implantación alta y colocadas muy atrás. Su cola es fina y muy delgada. Su pelaje es muy corto, fino, brillante, pegado y de una sola capa. Su color varía pudiendo ser bicolor negro y canela o marrón y fuego estando las marcas canela bien delimitadas o unicolor rojo cervato en diferentes tonos.
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Origen e historia del RATÓN DE PRAGA
El Ratón de Praga es una raza antigua ligada al Estado Bohemio y presente en diferentes fuentes literarias desde al menos el Siglo IX. Estos pequeños perros checos eran especialistas ratoneros y guardianes usados por patricios o monjes con este fin, pero también como perros de compañía.
Su actual aspecto se debe al mestizaje de estos perros con otras razas pequeñas como el Terrier miniatura, el Pinscher miniatura e incluso el Chihuahua, lo que ha conformado un perro muy pequeño. Actualmente es una raza que cuenta con el reconocimiento local de la Unión Canófila Checa. Sin embargo, dada su creciente popularidad es posible que en breve la FCI la reconozca oficialmente.
Temperamento y comportamiento del RATÓN DE PRAGA
El Ratón de Praga o Prazsky Krysarik es un perro muy activo, movido, incansable, excepcionalmente inteligente, de rápido aprendizaje, muy obediente y sumamente atlético. Aunque venido a menos, conserva en cierto modo su instinto cazador de ratones.
Pese a su reducido tamaño se trata de un animal robusto y un compañero infatigable, muy apegado a su familia y siempre dispuesto para cualquier actividad y, sobre todo, para estar cogido en brazos.
Su carácter es amable y paciente con los niños lo que sumado a sus reducidas dimensiones y que no sea un perro excesivamente ladrador, lo convierte en un perfecto animal de compañía. Además de esta función, el ratón de Praga se emplea también como perro de buscador de trufas, gracias a su excepcional olfato.
Carácter del Ratón de Praga
El carácter del Ratón del Praga es el de un perro amable y obediente que le encanta estar con la familia y es un compañero de juegos perfecto para estar con los niños. A pesar de su diminuto tamaño, el carácter del Ratón de Praga es el de un perro vivaz y enérgico que parece que nunca se cansa y además es un perro muy inteligente.
Siempre atento y pendiente de lo que haga su dueño, el carácter del Ratón de Praga es el de un perro dulce que a pesar su familiaridad no es nada territorial y poco dado a los ladridos. Le encanta estar rodeado de la familia con la que siempre se muestra muy atento y además disfruta interactuando con ellos; bien jugando, de paseo, con los niños... Con un olfato increíble, el Ratón de Praga se utilizaba para buscar trufas.
Le encanta estar en brazos, es como un peluche y no le importa pasar tiempo solo aunque habrá que acostumbrarlo desde que es un cachorro. El carácter del Ratón de Praga es el del perro ideal: amable con los niños, obediente y un gran amigo para toda la familia. Sin embargo, el carácter del Ratón de Praga le hace desconfiar de los extraños y de todos aquellos que son ajenos a la familia.
Además, gracias a ese carácter tan bueno, al Ratón de Praga se le puede llevar a cualquier sitio y se le puede llevar en un bolso en el transporte público sin la necesidades de que vaya en el compartimento destinado para equipajes. El carácter del Ratón de Praga es tan bueno que podrás llevártelo todo un día de compras a un centro comercial y no dirá nada ¿No es el compañero ideal?
Salud y cuidados del RATÓN DE PRAGA
El Ratón de Praga es una raza de perro fuerte y sana pero propensa a lesiones óseas dado su osamenta fina en exceso. Muchos ejemplares padecen luxaciones de rotula. También presentan problemas de dentadura como dificultad en la muda de los dientes de leche, algo que requiere de intervención veterinaria. Por lo demás, no presenta especiales problemas de salud, más allá de los cuidados veterinarios comunes a todos los perros.
Hay que vigilar la alimentación del Ratón de Praga en su edad temprana pues al ser un perro de dimensiones reducidas sus necesidades energéticas son altas.
Respecto a su fino pelaje, este no necesita de especiales cuidados salvo un cepillado ocasional. Hay que controlarle, sin embargo, ojos, oídos y uñas y bañarlo mensualmente.