Raza de gato DEVON REX
El Devon Rex es un gato de cuerpo esbelto pero duro, musculoso, de talla mediana y moderadamente alargado. Su cabeza es pequeña, corta y de perfil anguloso, con los ojos grandes y ovalados y las orejas grandes y puntiagudas con respecto a la cabeza. Su cola es larga y fina. Su pelaje es muy corto, suave y rizado, similar al del Cornish Rex, que forma pequeñas ondas o remolinos. Se aceptan todos los colores aunque son más típicos los de color blanco, humo blanco y negro, azul crema.
El origen del Devon Rex está ligado a una mutación genética natural del pelo normal o liso a pelo rizado diferente a la del Cornix Rex. Todo comenzó en 1960, en el condado de Devon, Inglaterra a partir de un nacimiento casual donde algunos gatitos presentaban esta particularidad. Los gatos de raza devon rex son portadores de un gen recesivo (re) mutado del gen dominante R responsable del pelo normal y liso del gato. Algunos cachorros no tendrán el pelo en su totalidad hasta los 18 meses, puesto que el crecimiento de los pelos primarios y de las cerdillas se retrasa por este hecho. Los cuidadores han potenciado la selección de estos gatos conformando la raza que actualmente está reconocida por las principales federaciones felinas.
p> El Devon Rex es un gato juguetón, vivaz, incansable y bastante sociable. También es muy alegre y curioso y no soporta estar mucho rato en soledad agradeciendo la compañía humana y también la de otros gatos con los que puede establecer vínculos de total dependencia. Son muy adaptables e ideales para apartamentos.
El Devon Rex es un gato fuerte y saludable. Hasta la fecha no se le ha determinado ninguna afección genética característica siendo en la actualidad una raza muy longeva. Respecto a sus cuidados no precisa ninguno especial más allá de las atenciones veterinarias típicas a todos los gatos. Su pelaje es bastante hipoalergénico y suele ser ideal para las personas con alergias no muy severas. Es conveniente controlarle sus orejas para evitar exceso de cerumen. Es también conveniente cepillarlo regularmente al menos dos o tres veces por semana y bañarlo anualmente para retirar el exceso de sebo.