Más allá de los juguetes industriales, existe un amplio abanico de opciones, conócelo
Adorables, elegantes, simpáticos e inigualables en su gracilidad. Rápidos en sus reflejos, cazadores por naturaleza… los gatos poseen un conjunto de habilidades que los convierten en compañeros de juegos únicos. De hecho, estos instantes de ocio entre felino y humano son capaces de estrechar los lazos entre ambos; un vínculo que se ve reforzado cuando el animal considera a su dueño como un igual. Pero no solo eso sino que les ayudarán a evitar las depresiones, a mantenerse activos, a alejar el sobrepeso, y a reducir los problemas de comportamiento. Sin embargo, si acabas de adoptar a un minino y todavía no has descubierto sus “debilidades” (aquellos juegos a los que no puede resistirse), las pautas que te proponemos a continuación te resultarán muy útiles.
Cómo jugar con un gato, con cosas de casa
En primer lugar nos referiremos a los juguetes específicos para gatos, a aquellos fabricados pensando en la diversión de nuestros peludos. Encontrarás una amplia variedad en tiendas especializadas; variedad que abarca desde pelotas con cascabeles y/o plumas, ratones de imitación, cañas de pescar con peluche en un extremo, guantes con añadidos, laberintos en los que perseguir una bola, etcétera. Sin embargo, no son los únicos (y ni siquiera nuestra alternativa favorita).
Sí, porque al margen de los juguetes industriales, encontramos otro tipo de objetos que hacen las delicias de nuestras mascotas; objetos que forman parte de nuestra cotidianidad y que, cuando acogemos un gato se convierten en algo más: en fuente de auténtica diversión. Es el caso de las sábanas; seguro que has notado que se pirra por tus pies cuando te metes en la cama. Se trata de un juego de un ritual de caza. Esconde tu mano y muévela, tentándole. Su velocidad e instinto resultan hipnóticos. Ten en cuenta que, a raíz de esto, lo más probable es que el animal acuda “buscando guerra” cada vez que pliegues o cambies la ropa de cama.
Los cinturones del batín o el albornoz y los cordones son otros de sus favoritos. Suspéndelos en el aire y balancéalos. Además, si tienes que salir de casa, puedes dejarlo anudado a la manivela de alguna puerta en un lugar en el que haya corriente. Estarán entretenidos durante horas.
Por otra parte y aunque este tipo de comportamiento se asocia con los perros en la mayoría de ocasiones, perseguir bolas de papel (incluso las de papel de plata) constituye otra de sus aficiones. Si vives en una casa con pasillo, lánzalas y verás cómo sale corriendo tras ellas. Sucede algo similar con los calcetines, las bolsas de plástico enrolladas (con las que deberás tomar ciertas precauciones), los tapones de corcho, los de plástico y las pinzas de tender la ropa, que producen un particular sonido. Incluso existen unas “chuches” o premios para minino de forma redondeada ideales para despertar su base depredadora.
Otra opción es colocar un objeto pequeño (como los citados en el punto anterior) sobre un lugar alto. No podrán dejar de subir y lanzarlo con la patita, tanteando con toda su gracia.
Nuestras propias manos pueden convertirse también en fuente de diversión. La idea es excitar al gato (incitarle al juego) tocándole determinados puntos del cuerpo. La parte del lomo más cercana al rabo es una de esas zonas clave. Hazlo con suavidad y enseña a tu minino a no morderte (las manos son las que lo acarician y alimentan). Cuando lo haga, ciérrale la boca durante unos segundos. En caso de que arañe, apriétale las pezuñitas y amonéstale. Ahora bien, si quieres prevenir, lo ideal sería que te hicieses con unos guantes gruesos (específicos, de motorista o similar).
Una idea muy económica es agujerear una caja de cartón y meter los dedos por los orificios, de manera que tu mascota deba cazarlos desde la parte superior. Les encanta.
Un puntero láser -aunque muchos lo consideran un juego cruel para el animalito que será incapaz de capturar la luz-, asimismo, les resulta tremendamente estimulante. Eso sí, no le apuntes directamente a los ojos y respeta sus ritmos.
Y tú, ¿estás preparado para gozar de instantes de extrema diversión con tu minino?
Periodista y fotógrafa
junio de 2015
Cómo jugar con un gato es un consejo para Gatos, y habla sobre Cuidados.
